El Valle del Cauca, generador de energía renovable

 

Sin alardes, ni discursos pontificando sobre los efectos del cambio climático, el Valle del Cauca, a través del sector agroindustrial, industrial y gobernación es pionero y líder en generación de energía renovable. En la última década y con recursos propios privados, las inversiones en el sector son transcendentales, con fuentes de recursos originados por multiplicidad de actores.

 

Cuando el presidente Andrés Pastrana levantó el monopolio de producción de etanol generó la oportunidad para que el sector agroindustrial pudiera diversificar en el sector de energías renovables. El sector azucarero, con recursos de crédito, reinversión de utilidades, beneficios fiscales y decisión, construyó una plataforma de destilerías utilizando el bagazo de la caña de azúcar para la producción de etanol. Es así como se gestó incorporar hasta un 10% al componente de gasolina de origen fósil, un elemento de energía oxigenante no contaminante. Colombia produce aproximadamente 20 millones de galones/mes, de los cuales el sector azucarero aporta el 70%.

 

Adicionalmente a este compromiso medioambiental el sector agroindustrial del país inició la producción de biodiesel. El sector de palma africana, el de mayor crecimiento agroindustrial en Colombia, se ha convertido en el principal productor. Aporta siete plantas y una producción estimada de 800 mil toneladas anuales. Del aceite de palma se estima el 32% se convierte en biodiesel. A este modelo de generación se suma el sector avícola con generación de Biogás a partir de residuos orgánicos.

 

Siguiendo el compromiso medioambiental el sector azucarero se convirtió en el de mayor potencial de cogeneración en el país. Estudios del mismo sector estiman los niveles de cogeneración están generando energía que cubre el equivalente a 500 mil hogares.

 

El sector agroindustrial e industrial ha incursionado exitosamente con iniciativas de granjas solares. Postobón, Zona Franca del Pacifico, Colombina, Solla, Grasas S.A., entre otras, y a partir de enero (2024), la Gobernación del Valle del Cauca, a través de la Industria de Licores del Valle aportarán más de 50 MW a la red nacional de energía. Sumado a la cogeneración, el Valle del Cauca aporta energía para suplir las necesidades de una cuarta de su población.

 

En vez de atacar el presidente Petro los combustibles fósiles, el petróleo y la extracción minero energético como es su costumbre, debería conocer mejor el país que gobierna. Aprovechando la conferencia de la Naciones Unidas sobre cambio climático en Dubái, capital petrolera del mundo, acompañado con una  abultada y acostumbrada comitiva de paseo por el mundo, debería llevar el positivo mensaje del compromiso ambiental de sus coterráneos, quienes con tenacidad invierten en revertir el cambio climático con acciones fehacientes de transición energética. De paso olvida el presidente que el 70% de la generación limpia es basicamente hidroeléctrica, recurso renovable.

 

https://guillermoulloatenorio.blogspot.com/2021/08/colombia-es-potencia-energetica-global.html

 

Tal y como sucedió cuando Jesús regresó a Nazaret, encontrando que su mensaje evangelizador era recibido por escépticos en su tierra natal y dijo “ningún profeta es aceptado en su tierra” sucede con el sector agroindustrial e industrial en iniciativas de transición energética. El presidente Petro, enceguecido por su persecución enfermiza contra el sector de hidrocarburos, no reconoce que somos referente global de transición energética.

 

Quizás también la culpa es nuestra cultura de guardar silencio en vez de cacarear como la gallina cuando pone su huevo.