Seis Retos de Cali para el 2017 I


El primer año de administración, catalogado de aprendizaje, de la bien intencionada y neófita administración municipal, deja más interrogantes que logros palpables ante la complejidad que asumió el mandatario, conquistada mediante copiosa y legítima victoria democrática.
Desaprovechó la independencia le fue otorgada en las urnas en la conformación y retención de un equipo de trabajo, con altos perfiles en administración pública, sin presiones del consabido y enquistado apetito burocrático, compensando su desconocimiento e inexperiencia en la complicada tarea de dirigir los destinos de un municipio en pleno desarrollo y ebullición.
En varios artículos esbozaré y aportaré lo que considero son lo seis retos y pilares fundamentales que permitan un desarrollo sostenible y de profundo impacto, proyectando la ciudad que soñamos.
1. Movilidad                      
El más sentido de los problemas urbanos de la ciudad es la movilidad. Los ingentes esfuerzos de la Secretaria de Transito, dedicada prioritariamente a regulación, control documental y restricción del tráfico vehicular, son eclipsados por la mayor complejidad del desplazamiento poblacional, en toda su dimensión y diferentes modos de transporte; peatones, ciclo usuarios, motocicletas, tracción animal, reparto de mercancías, vehículos públicos, privados y el letargo del MIO.
El excepcional incremento del parque automotor, falta de infraestructura, anarquía reinante de conductores, la inestabilidad en la dirección de Metrocali y Secretaria de Transito e incapacidad de ofertar un transporte masivo eficiente, son algunos factores que no permitieron proyectar planes de movilidad integral acordes a la necesidad de desplazamiento de toda la población.
Los avances tecnológicos disponibles en semaforización inteligente y mejor utilización de equipos de foto detección, herramientas fundamentales, deben implementarse para la optimización en regulación de flujos de trafico integrales, mientras se adapta el plan vial e integral de movilidad urbana, estudios, que después de cinco años, no han sido entregados a la administración municipal.
La improvisación, sin sustento técnico, de algunas medidas de control, es quizás el más grave error de la administración. Existen dudas sobre la efectividad de anticipar el pico y placa una hora en la mañana. Se desconoce la simulación e impacto de vehículos exentos de la medida, acogiéndose al pago por descongestión, medida fiscal de beneficio directo a operadores del MIO, sin estimular, ni compensar la demanda, corrigiendo deficiencias en tiempos de recorrido, trasbordos y operación logística para optimizar el actual parque rodante.
2. Seguridad
Se ha recibido con beneplácito las estadísticas de menor número de homicidios comparativo al año inmediatamente anterior. No obstante, la falta de patrullaje permanente en todas las comunas de la ciudad ha sido aprovechada por bandas delincuenciales. Los atracos callejeros, robo de celulares, de viviendas y uso de armas de fuego, supuestamente prohibidas por decreto presidencial, se han incrementado ponencialmente.
El alcalde debe exigir mayor permanencia, casi igual a su periodo, en la comandancia de la institución policiva. Estos constantes cambios no permiten diseñar, implementar y corregir estrategias y acciones de ataque frontal ante los flagelos a que es sometida la población.
En los próximos tres años, debe duplicarse la plataforma de cámaras de vigilancia e introducción de nuevos sistemas de monitoreo y vigilancia de avanzada tecnología. Debe insistirse en la conformación de un cuerpo elite profesional para erradicar las bandas criminales que azotan, apoderadas territorialmente de algunas comunas, zonas de pacífica convivencia, vías principales y cruces de alta peligrosidad.

En próximas entregas desarrollaré otros cuatro retos fundamentales; Infraestructura, Servicios Públicos, Reforma Administrativa e Inversión Social.

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