Un fenómeno llamado Uribe
Hace unos días estuvo en Cali, el ex
presidente Álvaro Uribe Vélez, concluyendo el ciclo de más de cuarenta
conversatorios temáticos, en igual número de poblaciones en el país, en compañía
de los cinco pre candidatos presidenciables del partido Centro Democrático.
Para sus seguidores es un político cautivante.
Combina, carismáticamente, celebres frases del sencillo coloquio “paisa”, con
profundo, analítico y fundamentado conocimiento macro económico y social del país.
De “agitador profesional”, como jocosamente se auto calificó en uno de los
foros, es recibido con altura en complejos escenarios internacionales,
destacando su perfil de estadista global.
Su prodigiosa y envidiable memoria, apoyada
en una disciplinada formación académica, transita de evocar sonetos liricos y poéticos,
a recitar, sin equivocaciones, las estadísticas que miden el comportamiento
socio económico y político del país y el continente.
Su recia y transparente personalidad no doblega
ni se somete a la adversidad. Contrariamente, cultivan la sencillez de expresar
sus ideas, enfrentándose como un David contemporáneo al Goliat desigual de un
aparato legislativo, judicial y ejecutivo enceguecido y entumecido por mieles
pasajeras del poder.
Las bases ideológicas de su partido, Centro Democrático,
son a su vez, al igual que su personalidad, sencillas pero universales.
La Seguridad Democrática, la cual fue
bandera de su administración, no solamente se describió como autoridad y
seguridad física, sino el derecho inalienable fundamental del ciudadano a la
seguridad jurídica, política e institucionalidad democrática republicana.
La Confianza Inversionista es baluarte
en el crecimiento socio económico del país. Una nación que no posee, explotación
de incalculables recursos naturales, cuyas regalías satisfacen las necesidades básicas
de la población, depende de la seguridad que el estado provee a la creatividad
e iniciativa privada emprendedora garantizando formalización del empleo y aportando
tributariamente hacia la sostenibilidad socio económica.
El aparato estatal, debe ser eficiente,
transparente, productivo, austero y descentralizado. No puede
emplear sus recursos hacia el laberinto de contrataciones, cultivo del flagelo
de la corrupción enquistada en la sociedad política administrativa de la nación.
La inversión juiciosa de los recursos del
estado, que el sector privado productivo genera, son el pilar fundamental de la
Cohesión
Social, encaminada a la superación de niveles de pobreza, equidad y
democracia participativa.
La coherencia ideológica, expresada
personalmente y a través de su partido, es razón esencial de la inmensa
popularidad que registran los sondeos.
No obstante es un personaje que induce odios
y amores, Colombia seguirá simpatizando con un fenómeno llamado Uribe.
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarUn extraordinario ser humano. Antes de su ida a Oxford, donde yo tambien estudie, y al dejarlo en el aeropuerto de Sto Domingo, pues habia finalizado una consultoria para el PNUD, donde yo en ese momento ejercia el rango de Adjunto, me dijo, volteandose hacia mi, "Cuando regrese de Oxford, sere Presidente de Colombia". Y asi fue.
ResponderEliminarExcelente aporte, gracias
ResponderEliminarhombre integro , que merce respeto y admiracion
ResponderEliminarSi Urbe es un fenómeno. Esos líderes no se dan a cada rato.
ResponderEliminarHonrado, serio, sencillo, tiene a toda Colombia en su cerebro, como hombre versátil sabe indicar que se necesita hacer en cada región y lo hace con sencillez. Seguro de sus proyectos, tiene a Colombia en su cabeza presto para actuar. Con todas las cualidades innatas de un gran lidere. Un super dotado.