¿Para donde va Cali? Retos I

Desde hace diez años, las Fundaciones Corona, Alvaralice, las Cámaras de Comercio de Cali, Bogotá, la Universidad Autónoma de Occidente y los diarios El Tiempo y El País apoyan el programa, Cali Como Vamos de seguimiento y evaluación de la calidad de vida en la ciudad.

Mediante un trabajo estadístico promueve y hace seguimiento a la evolución de la calidad de vida en la ciudad, a partir del comportamiento de indicadores técnicos en once áreas temáticas -educación, salud, servicios públicos, vivienda, espacio público, movilidad, medio ambiente, responsabilidad ciudadana, seguridad ciudadana, finanzas públicas y desarrollo económico.

 La encuesta arroja que un 50% de reconoce que la ciudad va por buen camino, no obstante la insatisfacción del MIO, la falta de obras viales que mejoren la movilidad, la percepción de inseguridad y la problemática de los cortes en el suministro de agua.

Aunque la administración Guerrero anunció permanentemente iniciativas, no logró mejorar índices de satisfacción y percepción, siendo las más complejas Movilidad y Seguridad.

La insatisfacción del transporte masivo incrementó el uso de la motocicleta como medio de transporte, registrando un 29%, casi similar al 32% que emplea el MIO. Desafortunadamente en los últimos diez años la utilización del sistema público bajó del 61 al 43% y el privado se incremento del 20 al 43%, igualando ambos medios. El reto de METROCALI es mejorar los tiempos de recorrido, los cuales en parte se ven afectados por la congestión vehicular a la cual son sometidos los alimentadores y padrones, compitiendo con los demás vehículos. La utilización de carriles exclusivos mejoraría sustancialmente los tiempos de viaje y transbordos.

La ciudad requiere un plan vial moderno, con visión a largo plazo, que permita movilizar eficientemente el mayor parque automotor. La continuidad de la vía circunvalar de los cerros y la Avenida Ciudad de Cali, vías perimetrales, descongestionarían principalmente el trafico del sur. Conectar la red de ciclo rutas de la ciudad, debidamente iluminada y con dispositivos de seguridad, incrementaría el uso de la bicicleta, especialmente beneficiando la población estudiantil. Construir el plan maestro de andenes contribuiría a la peatonalización de la ciudad, especialmente la zona del centro ampliado y sectores de alta concentración poblacional.

Aunque la tasa de homicidios, concentrada en algunas comunas de  la ciudad, es la más baja de los últimos veinte años, la percepción ciudadana es que los atracos callejeros (43%), la drogadicción(34%), las pandillas juveniles(25%), el micro tráfico (12%) y en menor grado la indigencia (9%) son los principales problemas y merecen solución inmediata.

Además del pie de fuerza policivo, dotación y mantenimiento del equipo automotor, instalación de cámaras de seguridad, dispositivos de comunicación, mejor iluminación y patrullaje, se requiere mayor interacción entre población y organismos de seguridad.  Debe promoverse mayor integración entre JAC, JAL y organizaciones de base para identificar y dar solución a la problemática, definiendo estrategias y planes de acción comunales.

Compleja tarea le espera a la administración que inicia actividades para mejorar la percepción, expectativa y realidad ciudadana, cimentando una ciudad más competitiva y con mejor calidad de vida.