“Al infinito y más allá”

La célebre exclamación del personaje ficticio Buzz Lightyear en la película animada Toy Story (1995), producción del estudio cinematográfico Pixar (Disney), es aplicable al dinámico desarrollo del comercio electrónico, conocido como E-commerce.

Ese mismo año, un joven ejecutivo, empleado en un fondo de inversión, emprendía su sueño de crear una librería virtual. Apoyado en la novedosa plataforma de internet, ofrecía un catalogo de libros, los cuales podían ser comprados directamente en línea, despachados a domicilio y recibidos en pocos días. La primera venta virtual se realizo el 16 de Julio de 1995.

Jeff Bezos, el fundador de Amazon, a sus 54 años, según las revistas Forbes y Bloomberg, es hoy considerado el hombre más rico del planeta, con una fortuna aproximada de US $ 150 mil millones.  En escasos veintitrés años, convirtió esa incipiente librería virtual en un negocio de comercio electrónico que ofrece desde una aguja hasta el más sofisticado instrumento de avanzada tecnología.

La evolución del comercio electrónico, dinamizada su actividad con el uso universal de teléfonos inteligentes y aplicaciones amigables, ha venido enterrando esquemas convencionales de ventas por catalogo, por correo, por teléfono y amenaza seriamente el comercio tradicional presencial de tiendas, supermercados y centros comerciales.

El año pasado, en uno de sus acostumbrados movimientos audaces y estratégicos, Amazon compró una cadena de supermercados poniendo a disposición de sus clientes la oferta completa de alimentos, incluyendo frutas y verduras.

La empresa global más importante del comercio detallista Wal-Mart, anunció su llegada a la  ciudad de Nueva York, pero esta vez, no con tienda física, sino con una operación e infraestructura de logística que ofrecerá ventas virtuales y despachos a domicilio.

Latinoamérica no se ha quedado atrás en el desarrollo de comercio electrónico, apoyado fundamentalmente en operaciones de impecable manejo de logística. Han surgido empresas, con patrones similares, como la argentina, MercadoLibre.com, del joven emprendedor, Marcos Galperin, con presencia en dieciocho países latinoamericanos.

Falabella, anunció recientemente, la compra de la detallista de comercio electrónico Linio, en respuesta a la presencia física operacional de Amazon, con centro de logística, en América Latina. Aunque aún no ha revelado una ubicación definitiva, Chile ha venido realizando acercamientos para que sea escogido como país anfitrión. Colombia, por su privilegiada ubicación, debía ser la lógica selección. Es un reto prioritario que deberá asumir el Presidente Duque y su equipo de gobierno.

Cientos de pequeños emprendedores tecnológicos, conocidos con el apelativo de economía naranja, han creado plataformas de despachos a domicilio especializados, equiparándose a grandes actores como Fedex o Servientrega, ofreciendo novedosos servicios, liberando al comprador de las angustias de limitación de tiempo para compras y el vía crucis del caótico tráfico urbano.

Los grandes establecimientos comerciales locales, Grupo Éxito, Jumbo, La 14, entre otros, deberán innovar rápida y eficazmente migrando hacia la tendencia del comercio electrónico, buscando aliados estratégicos, antes de ser apabullados por los monstruos comerciales que el nuevo sistema comercial global ha creado. 

A manera de coletilla, el comportamiento de resultados del primer semestre, ubican a Apple, como la empresa de mayor valor global, superando el trillón de dólares, Amazon con los mejores resultados en su historia, Microsoft evolucionando rentablemente con sus plataformas informáticas en nube, Samsung líder del mercado de celulares, seguido de Huawei, quien desbancó al I-phone del segundo lugar.

La revolución del comercio electrónico avanzará a niveles jamás soñados.