Disfrutemos la época veraniega
El mes de junio trae una de las épocas más hermosas del año. En la alborada del cristalino amanecer, el crepúsculo de los primeros rayos ilumina en la distancia las peñas blancas incrustadas en la majestuosidad de riscos de los Farallones caleños.
Los guayacanes prontamente empezaran a lucir su bello colorido. Rosados, amarillos, blancos adornarán parques, avenidas, separadores viales y antejardines y sus flores cubrirán como bello tapete el verde de la grama. Los estilados gualandayes se vestirán de purpura primaveral, las copas de las acacias de rojo encendido y las flores de color salmón de los cámbulos atraerán polinizadores naturales de abejas, colibríes y aves nectarívoras.
Las buganvillas veraniegas transformaran sus esqueléticas ramas de verdes hojas brillantes con un espléndido matiz de flores blancas, rosadas, rojo carmín y moradas en manifestación de jolgorio natural.
Las lluvias se tornarán en esporádicas ruidosas tormentas que en la lejanía son anunciadas por el trueno de sus relámpagos, seguidas del lejano murmullo de gotas de agua cayendo al piso, humedeciendo y refrescando el ambiente.
Los vientos de agosto empujarán cometas e impulsarán el vuelo circular de aves que abandonan su buitrera avizorando el manjar del día. Los loros de plumaje verde y cara amarilla, algunos excepcionalmente de arco iris de colores, parloteando alegremente en bandadas festejando su camaradería, son atractivo sonoro a toda hora.
La diversidad aviar, la cual registró en reciente medición en primer lugar a Colombia como uno de los países mas biodiversos con 1532 especies avistadas en un solo día, es una afición de avistamiento que no puede desaprovecharse. Sin sofisticados equipos, binóculos o cámaras de potentes lentes, tan solo con el celular se pueden tomar imágenes de las aves avistadas para posteriormente identificar en las múltiples plataformas y aplicaciones disponibles. Convertir el avistamiento en entretenimiento es sencillo, enriquecedor y de disfrute familiar.
Las risas y gritos de la juventud disfrutando el receso escolar son canto de alegría. Las prendas ligeras utilizadas para soportar las altas temperaturas ayudarán a broncear la piel destacando la belleza femenina y el atractivo muscular masculino.
El senderismo y actividades aeróbicas, aprovechando los parques urbanos, cerros tutelares y descubriendo el entorno natural de los corregimientos caleños, se convertirán en atractivo y saludable ejercicio cotidiano.
Es momento de aprovechar la bendición concedida a este rincón paradisiaco vallecaucano. La estacionalidad seca no es para encerrarse, es precisamente lo contrario. Es época de disfrute, alegría y despertar del espíritu aventurero que nos acompaña.
https://guillermoulloatenorio.blogspot.com/2023/07/centenaria-costumbre-de-soportar-el.html
Emigremos del sedentarismo hacia saludables hábitos que la temporada incentiva.
Fotografía cortesía El País
Comentarios
Publicar un comentario